Las fuertes precipitaciones caídas ayer sobre la Serranía de Ronda dejaron arroyos convertidos en ríos y ríos desbordados en muchos tramos, como le ocurrió al Guadalcovacín, al Guadalevín y al Guadiario, cuyos cauces se quedaron pequeños para absorber tanta cantidad de agua e inundaron amplias extensiones de terrenos contiguas a sus riveras.
El desbordamiento del arroyo de la Toma provocó que la Policía Local de Ronda tuviese que proceder a cortar el acceso a la ciudad desde la carretera de circunvalación por la barriada de Padre Jesús, al invadir el agua la calzada y llegar a las paredes de varios de los cortijos y casas que se encuentran situadas en este camino, que suele ser utilizado por los vecinos para evitar tener que cruzar el casco urbano para entrar y salir de la población.
Pero no fueron los únicos afectados, también permanecieron aislados durante algunas horas los vecinos del paraje de Los Molinos, en plena Hoya del Tajo, al superar el agua el puente que les comunica con Ronda por el Barrio de San Francisco y cortar el camino de acceso un desprendimiento en la salida hacia la carrera Ronda-Sevilla.
Mientras tanto, la gran cantidad de agua que trasladaban los afluentes del Guadiaro hacia que el nivel de este río creciese de forma preocupante, hasta el punto que la alcaldesa de Jimera de Líbar, Mayte Domínguez, expresó su temor ante la proximidad del agua a la barriada de la Estación de Jimera, situada a escasos metros del cauce. “Si no deja de llover esta noche (por ayer) vamos a tener problemas”, decía la alcaldesa, conocedores de las inundaciones que se han producido en otros momentos. De hecho, el agua cortó ayer el camino hacia la ermita situada en este paraje, mientras desde el Consistorio se mantenía una estrecha vigilancia sobre el nivel del caudal.
De igual modo, el río llegaba al límite de su capacidad en la pedanía rondeña de La Indiana, rozando las paredes de algunas casas y de algunas cuadras y corrales.
Continúan las alertas hoy
Mientras tanto, la lluvia continúa cayendo hoy, y la Agencia Estatal de Meteorología mantendrá activa la alerta amarilla por riesgo hasta las 18:00 horas. Además, también está activada la alerta por las fuertes rachas de viento, que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora.
