Los militantes del PSOE rondeño suspendidos la pasada semana no parecen dispuestos a quedarse de brazos cruzados a esperar qué sucederá con la agrupación local. Un grupo de ellos ha decidido pasar a la acción tras conocer la medida adoptada y ha convocado una reunión para el próximo viernes en la Casa de la Cultura de Ronda. En este encuentro pretenden informar al resto de sus compañeros de la situación que se ha creado y conocer la postura de los mismos antes de realizar unas acciones.
La cabeza visible de este grupo es la exconcejal socialista Josefa Becerra, que ya hizo público su malestar y desacuerdo con la decisión adoptada. Junto a ella se encuentran otros exediles, destacando Juan Fraile, que no ha ahorrado críticas hacia lo ocurrido, al considerar que se extiende la sospecha sobre la totalidad de los integrantes del PSOE. Algunos afectados ya han tomado la decisión de solicitar la baja definitiva como militantes socialistas, mientras otros se decantan por declararse en rebeldía y dejar de pagar la correspondiente cuota mientras dura la suspensión.
Fuentes socialistas aseguraron a este periódico que la Comisión de Garantías de la organización podría entrar a valorar lo ocurrido en la ciudad del Tajo, mientras algunos de los afectados por la suspensión aseguran que pedirán su intervención, al considerar que el proceso no se ajusta a lo establecido en los estatutos de la formación para este tipo de casos. Incluso, hay voces que no cierran la puerta a la opción de acudir a los tribunales ordinarios al considerar que se han hurtado sus derechos fundamentales y se podría dañar a su juiciosu honorabilidad.
